Un buen agente inmobiliario evitará cometer los siguientes errores:
- No publicará su tarifa en ningún tipo de anuncio.
Por mucho que algunas agencias canten a los cuatro vientos lo que cobran por sus servicios, anunciar el precio de tus servicios es una mala práctica inmobiliaria que no se debe hacer. La razón es que en el importe de los honorarios se pueden incluir cláusulas y gastos que o bien no se añadan en el precio o que varíen en función de los objetivos. - Anunciar pisos sin autorización.
Esta es una práctica más común de lo normal. Para que una agencia pueda anunciar una propiedad debe ponerse en contacto con el propietario o propietarios para conseguir su permiso. Este debe constar en un documento conocido como «encargo de venta» donde se especifican todos los detalles y condiciones de publicidad. Por supuesto, en el documento deberá estar reflejado el precio de salida, la comisión de la agencia, las condiciones de transmisión e impuestos y finalmente toda la documentación necesaria para anunciar la casa o piso. Incluso debería especificarse en qué plataforma (internet, en persona, plataformas inmobiliarias) será anunciada. - Incluir servicios a mayores.
Un agente no puede ni debe inflar el precio de una vivienda si no quiere perder clientes. Por ello, lo correcto es establecer una serie de condiciones bien claras en el contrato para que no haya problemas de ningún tipo. En otras palabras, la letra pequeña debe ser entendible y legible. - Añadir cosas que no se cumplen.
Por ejemplo, si la agencia incluye en el contrato de compra venta un plan estratégico para conseguir clientes debe cumplirlo. Y es que cuantos más canales tenga una propiedad más probabilidades de venta tendrá. Los derechos y deberes de un agente inmobiliario es el cumplimiento de todas las cosas que se han firmado, plan de marketing incluido. - Inventarse ofertas y pisos.
Esta mala práctica es pan para hoy y hambre para mañana. De qué vale inventarse ofertas o pisos que no existen. Mentir descaradamente para conseguir llamadas y clientes es algo que debe evitarse a toda costa. Es preferible contar con pocos pisos, pero fiables que no muchos y algunos de ellos ficticios. Desde luego, es la mejor forma para perder clientes.
Si como agente evitas cometer estas malas prácticas inmobiliarias te asegurarás una buena reputación en el sector. ¿Qué te parecen estas medidas?, ¿Sabías cómo evitarlas?